Por Alvaro Santi
Taratólogo y Escritor / @mundopsiquico
De la misma manera que nuestro inconsciente le envía a la dimensión consciente una información vital para nuestro desarrollo cada noche a través de los sueños, la vida se expresa con señales y claves esclarecedoras en la vigilia. Para iniciarnos en su interpretación y comprensión comencemos por revisar el siguiente ejemplo:
Una mujer joven sale de su casa de noche para reunirse en un restaurante con algunas amigas y sorpresivamente cambia la ruta habitual internándose en una calle muy poco transitada. Una vez que ha avanzado hasta la mitad de la cuadra aparece sorpresivamente un hombre, le quita la cartera (que había sido un regalo de su ex) y corre hasta desaparecer. A pesar de que la mujer intenta resistirse al asalto con todas sus fuerzas el asaltante logra su objetivo.
¿Cuál podría ser en este caso el mensaje de su inconsciente?, ¿qué impulsó a esta mujer a transitar por un lugar distinto al habitual?
Partamos por analizar el escenario dónde la situación tiene lugar. En el ejemplo se trata de la calle. En la calle nos exponemos y nos relacionamos con los demás. Este primer elemento puede darnos una clave: el asunto está conectado con las relaciones que la protagonista establece. Analizar el escenario es básico para comprender el tema del que trata la experiencia, por ejemplo, si la pérdida hubiera ocurrido al interior de su casa tal vez se podría referir a la relación con ella misma. Si ocurre en un lugar considerado sagrado, una iglesia, por ejemplo, podría referirse a su espiritualidad o moral, en un colegio a un aprendizaje fundamental, etc.
¿Qué personajes participan de nuestra experiencia?
En el ejemplo están las amigas que esperan a la protagonista y un asaltante hombre. Las amigas pueden describir los vínculos más íntimos, mientras el asaltante a una fuerza racional (aspecto masculino de la mujer) que la conduce a desprenderse de algo.
Los elementos que aparecen en la experiencia pueden ser vistos como energías representadas. En este caso podemos decir que el elemento principal es la cartera. Utilizamos un bolso o cartera para trasladar cosas que consideramos valiosas y útiles. Para la mujer asaltada, su cartera tenía doble valor ya que se trataba de un regalo hecho por el que ahora era una ex pareja. El final de esa relación no había resultado fácil. Ella se había resistido al término tal como opuso resistencia al asalto. Era necesario tomar una distancia, ser más “frío” como suele decirse.
Todas los acontecimientos pueden ser interpretados, también los que consideramos positivos. La clave está en preguntarnos ¿qué representan cada uno de los elementos para nosotros?. La práctica de este ejercicio nos ayudará a ser más conscientes de nosotros mismos, a conocernos mejor.
Te animo a probar!